miércoles, octubre 22, 2008

No está mal lo que hacen, está mal por qué lo hacen...

Esa es la "ley de la oposición". El comienzo de esta nota de Mario Wainfeld ("los gobernantes, entre ellos la actual pareja presidencial, son ávidos de poder, desean ganar elecciones (¡aj!), ansían tener muchos recursos económicos... ambiciones lógicas que se equiparan con pecados capitales. Y esos objetivos descalifican desde el vamos cualquier política pública. Tanto que ni vale la pena internarse en sus consecuencias.") pone sobre relieve una verdad. En general los gobiernos, en su promedio, en su madurez, ya ofrecen a la sociedad un arsenal de rasgos que conforman su caricatura. Es como un sistema de códigos: en este caso, decir por ejemplo la palabra "valija", remite a la valija de Wilson de manera automática, y pretende esbozar una sonrisa en quien oye, ya no remite a las anteriores valijas públicas, las de Amira, por ejemplo, cada gobierno es un cuento cerrado. (...) Y los medios expresan tantos intereses e ideologías como, incluso, su propia torpeza lo permite. Hace un tiempo que estoy estudiando el tema de la despenalización del consumo de drogas. Que no es la "legalización", bla, bla. Ahora, imaginemos que hay un informe sobre el tema en un programa de televisión, o en un noticiero. Imaginemos que ese informe quiere plantear la situación con un tufillo un poco a favor de la despenalización, porque se trata de destrabar el energúmeno de que un adicto vaya a la justicia penal, etc. Y el pibe que lo edita, que incluso estaría de acuerdo con la nota, que fuma porro como loco, o cada tanto, le pone música de Marley al informe. Con el efecto que esa música denota, para mi, el de que -en el fondo- se impone lentamente un libre albedrío. Bueno, de ese pibe editor, como no importa lo que piensa, sí importa lo que no sabe que piensa. ¿Se entiende? Yo creo que todos los que se pierden en la discusión alrededor de los modos kirchneristas y las "intenciones de caja" (sobre las que habría muchísimo para hablar), ya sea desde los medios o, incluso, desde el carrioísmo al que abrevaron Lozanos y Pinos, tienen una intención involuntaria cuya expresión el Chacho fijó como norte político allá lejos, en los años de Carlos Saúl Menem, cuando empezó a decir: nos equivocamos en discutir la "convertibilidad", hay que reconocer lo que se hizo bien. Quiero decir: la eficacia de toda oposición pasará por construir el árbol que tapa el bosque. ¿Y qué bosque? El de ciertas continuidades. ¿La política en democracia es una discusión sobre las formas? Esa podría ser una conclusión mínima, aunque inestable y relativa.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo que a mí me inquieta es como se ha impuesto la narrativa de "la caja".
"La caja", "la caja" y la puta que lo pario.
Digo, eso no se llamaba en los 90' "disciplina fiscal".
El gordo Joe

Ester Lina dijo...

Si hay alguien que perjudica a las AFJP, no es el Gobierno. Fue la timba financiera la que las ha embromado y este gobierno, se ha dado cuenta, bien a tiempo, que si estas empresas quiebran, o siguen en baja, incumpliendo los compromisos asumidos, serán los argentinos los que pagarán la fiesta ajena. Al Estado le va a tocar proteger a tanto jubilado que queda sin nada... Ya lo está haciendo... existen pruebas respecto que el Estado ha tenido que hacerse cargo de millones de pesos, mientras taless empresas se han quedado solamente con las ganancias y con los malos negocios de inversión.
Pero OJO! que el Estado somos todos... (diría Bush que los plomeros y carpinteros han estado poniendo $$$ para pagarles a los jubilados que tendría que pagarles la AFJP...)
¿Que hacen caja, dicen? Y qué querían!!! Que tomen esta medida en el futuro, sin caja? Nos tocaría pagar más... cada uno de nosotros tendríamos que ponernos con más... porque es el Estado el que paga, no el Gobierno... somos vos, yo, y los demás argentinos.
Además, si hay tanto superávit fiscal? ¿Por qué necesitarían ÉSTE dinero si quieren robar? Encima ex vox populi... está anunciado en todos los medios y enviado a convalidar por nuestros representantes en las cámaras...
Si CFdeK no hubiera previsto esta situación, en pocos años tendríamos a los jubilados privados, golpeando cacerolas en el ANSES para exigir que el gobierno los subsidie...
Lo mismo hicieron los del campo, después del neoliberalismo de los 90, cuando, sin retenciones, estaban en situación paupérrima y muchas de sus tierras, en proceso de remate... Recuerden: el Estado intervino... esa vez fue Nestor K, con el dinero de todos...
Saludos