jueves, diciembre 31, 2009
El secreto de esos ojos
La víctima: mujer. Maestra. Bella. Inocente. Todas sus virtudes exacerban al energúmeno…
El victimario: hombre. Derecha. Psicópata. Macho futbolero.
El héroe: un héroe laico. Casi abogado. Oficial de justicia en medio de un estado fascista y peronista, una máquina del crimen duro, de la violación y la tortura. El personaje alcohólico (la mano derecha del héroe) es el compañero ejemplar que muere por el otro, preso de su enfermedad, que conoce el bajo fondo, que siempre es abandonado por la mujer… Los héroes son débiles hombres de Ley en medio de la ley del mas fuerte: no hay lugar para ellos, uno muere, el otro se va al norte, y esperan (en la tierra y en el cielo) que la historia reponga su lugar.
La familia de la víctima: un modo de amor que se apega a la víctima. Que ronda el resto de su vida sobre ella. Que detiene su tiempo en la ausencia.
El desenlace: ese espacio histórico no cedido aún al status de los crímenes de lesa humanidad en el que un hombre elige prolongar por mano propia los alcances de una justicia impotente y que se revela como el centro de toda justicia humana. Lo mas humana posible.
El secreto de sus ojos continúa la historia oficial desordenando su relato, dispersando el juego mas allá de la historia política, componiéndolo en un escenario gris, previo a la dictadura, en las contradicciones judiciales de un Estado que aún cuenta con voluntarios del estado de derecho mientras se cablea mas y mas, y se llena de patotas, y se empieza a cerrar el círculo del sistema represivo. O sea, en el imaginario videlista, esos descontrolados falangistas iban a ser reintroducidos, o, en muchos casos, marginados (por sus “vicios”) por la camaradería castrense (igual de corrupta y mas sofisticada) centralizada. El secreto de sus ojos es un filme acerca de la inocencia absoluta de la víctima. No hay un filme de una víctima tan "inocente", y a la vez, porta algunas verdades y novedades.
Teoría del demonio: por método lombrosiano se deduce quién es quién. En algún momento pensé: la violó Pablo Rago. Pero eso volvía a la historia un simple policial y arruinaba las expectativas infantiles de todo espectador: que el malo sea todo lo mas malo que se pueda. (El otro problema de Rago es que a muchos nos quedó patentada su voz en clave de sol: es muy difícil que la arrastre hacia otro lado. Ese es el problema de los actores de la tele, por ejemplo: ¿era creíble que en Crónica de una fuga te secuestre Pablo Echarri, acompañado de una patota que se parecían mas a Los Babasónicos que a los “ordinarios” de una patota? Todo es creíble, todo es creíble, en un país increíble.)
Quiero decir: El secreto de sus ojos no abandona esa estructura con la que se cuenta y se va a contar la dictadura. El secreto de sus ojos es La noche de los lápices, es La historia oficial… es un relato de Estado. Y quizás, porque algo de eso se parecerá a lo que fue el Proceso, toda su idea es la de un orden perdido en el laberinto del terror cuyo hilo no se pierde nunca, a lo sumo se interrumpe a veces, pero permanece en líneas de continuidad. El secreto de sus ojos nuevamente es el modo en que ese pasado debe ordenarse: es el relato de la ley. Uno diría: ¿la cultura kirchnerista agregó a ese alfonsinismo un leve plus de venganza, una dimensión menos universal que la Gran Escena Judicial, por tener el kirchnerismo una relación mas íntima y próxima al universo de las víctimas? Algo así como que si no hay justicia hay venganza, hay mano propia, pero esa "mano propia" es una representación casera de la justicia: como el ejercicio para-estatal de muchos organismos de DDHH que acopiaron datos, acumularon pruebas, escracharon, bucearon por los intersticios de la ley, hicieron juicios simbólicos, es decir, una "mano propia" que cautiva los hechos a la espera de la Ley. Y llegó, y siempre la ley tiene "el peso de la ley", o sea, violencia. Y digo que el kirchnerismo agregó eso en cuanto a su reivindicación mas palpable de la víctima, a la singularización y la reivindicación menos universal: ¡eran cuadros! ¡Eran compañeros! Pero en El secreto de sus ojos la víctima no es ni siquiera un perejil: es un objeto de deseo puro. Es el cuerpo de una mujer, una cara, ojos y pelo y tetas y piernas hermosas, cuerpo, cuerpo, cuerpo. ¿El secreto de sus ojos es la historia de un Estado Violador, un Estado por mano propia, tipos que a la menor afrenta pelan la pija?
La clave campanellista (esta vez: “todo tiempo pasado fue horrible”) tiene no sólo la idea de que ese tiempo se prolonga en el tiempo de las víctimas familiares, sino que el contrato social se sella entre los buenos: los que vengaron después de que se les incumplió su promesa de justicia. Y sin embargo, esa escena del cautiverio del Monstruo, parece un ensueño, como si los alambres que atraviesa Darín para llegar al casco de esa Estancia de cautiverio fueran el alambrado de la memoria y de la políticas de la memoria, hasta llegar a esa zona en que la víctima ha intercambiado su lugar: quiere tener al otro ahí, con ella. Un matadero laico donde no se goza con el dolor ajeno, pero donde se asegura que ese otro no se vaya de ahí nunca más.
miércoles, diciembre 30, 2009
El año viejo es un perro que no nos quiere dejar de seguir. El año nuevo ya asoma su cabecita calva. Esta es una gran noticia con la que despedirlo. (Y la foto del aplauso tiene algunas caras "opositoras" de las mas queridas en este blog: Ricardo, Felipe y Margarita.) "Todo gobierno tiene la responsabilidad de ejercer la conducción civil y estratégica de las policías..." Como escribe Mario Wainfeld: "La mano dura y la falta de autoridad civil no son un freno al crimen, sino un acicate para que éste se practique desde el propio Estado." Recomiendo para leer en la playa por última vez "El Leviatán Azul", de Marcelo Saín. La foto es de uno de los mejores cuadros de la política argentina.
martes, diciembre 29, 2009
lunes, diciembre 28, 2009
¿Cuánto hay de madurez y cuánto de domesticación en la política popular de la democracia? ¿Qué pasó con el futuro? ¿Qué hicimos con el futuro? Una parte la tiraron al río los mierdas. ¿Pero la otra? La otra, la otra parte del futuro, ¿dónde está?
El 28j, como fueron las cosas, pertenece a un tiempo, pero no exactamente al de este año que termina. Pertenece a una extensión del año pasado. 2008 es una línea que termina en esa madrugada de junio en el subsuelo del Hotel Continental. 2009 es un año corto que va del 29j al 3/12 (el día que Kirchner asumió la banca): Cinco meses donde el kirchnerismo impuso los restos de su mayoría. O sea que el 2010 ya arrancó, con el "brillo" de la efeméride del segundo centenario patrio, y con los primeros datos políticos que hacen trizas los sueños republicanos, o, que revelan su verdadera factura: Duhalde quiere ser presidente. Ese dato, que aún dirime su consistencia, sólo sirve para abonar la credibilidad del grito de muchos de nosotros: Kirchner sigue siendo el futuro. Lo crudo republicano es la vuelta a los límites del pacto preexistente al 2003. No mucho mas. Un año gris nos espera, lleno de comisiones investigadoras de un lado, y de sorpresas del otro. La democracia se ha saldado tras 26 años: no el rey, ¡todo el mundo anda en pelotas!
domingo, diciembre 27, 2009
"la sociedad no existe"
"Aquí es importante tener en cuenta que subjetivo no quiere decir irreal, mentiroso o irrelevante."
"Aquí es importante tener en cuenta que subjetivo no quiere decir irreal, mentiroso o irrelevante."
miércoles, diciembre 23, 2009
lunes, diciembre 21, 2009
Leyendo a Tomás
Recordé este post sobre las verdades de la democracia (sobre todo la número 9). Quizás envejeció, quizás envejecimos, porque estos tres años no fueron cualquiera. Creo que en lo que plantea Tomás hay un solo problema: y es que el relato da cuenta de una suerte de intervención espontánea de la clase política, como si ese umbral al que asomó la gente no hubiese sido creado también por una cadena de hechos mas o menos visibles que mantuvieron las ilusiones conmovidas y cuyo actor fue esa clase política. Duhalde perdió en 1999 por muchas razones, pero por una sobre todo quizás: porque dudó un poquito acerca de la continuidad del 1 a 1. Hay que dar una vueltita de tuerca mas: ¿hasta dónde el 19 y 20 no es la ruptura originaria de gente y política que permite de manera cabal construir esa escena institucional que pide Tomás?, ¿hasta dónde el 19 y 20 no es restauración del orden democrático y todos esos hechos "delirantes" no encadenan la verdadera alianza de clases que fue el duhaldismo?, ¿por qué no es posible ver que lo que se reclamó en esos días es el lugar que piensa Tomás para la política?, ¿por qué creer que tanta gente de verdad estaba dispuesta a tanto, a convertir el fin de año en una semana de mayo, que en cada cacerolero había un asambleísta? Quiero decir (y porque sólo se nota que pasa el tiempo cuando uno es capaz de hacer este tipo de lecturas) que se puede ver en esos días un reclamo por la representación, se puede ver que el "estallido" asumió protagonismos múltiples y "policlasistas" pero en favor de una restauración de las prioridades de una sociedad ya sólo democrática, que rompía su lazo de continuidad del proceso militar. Esa "horrible clase media cacerolera" no se sacaba de encima a un gobierno peronista, sino a un gobierno cuyas figuras habían sido sus estrellas, es decir: ponía la política afuera, condición para que en parte ocurra la "profesionalización" que pide Tomás. La mano invisible de esos días eran los movimientos tumultuosos del peronismo que volvía a gobernar el país empujado por la clase media, esa es la escena montada, esa articulación de los hechos: la clase media que lleva a Duhalde a gobernar, esa normalidad mínima alcanzada por dos entes que no se correspondían (podríamos decir que ni Menem era tan impopular en los sectores medios). En esa asimetría, en esa distancia entre una "clase media" y un presidente peronista fruto de la "pura institución" de la otra clase, la clase política, se cocinó una continuidad, y a la vez, una especie de distancia decisiva e infranqueable de la política. Nada mas burocrático que el gobierno de Duhalde. Lo que pasa es que las asambleas fueron como el árbol de esos hechos, una versión que trastorna lecturas de lo que se movía por debajo. Hasta el kirchnerismo nació con la virtud de leer una herencia progresista de ese tiempo y hoy se dibuja en la efeméride 19/20 una suerte de caos original del "ánimo destituyente", como si las cacerolas del campo fuesen la conciencia para sí de la clase cacerolera nacida en 2001. Quizás el fracaso del kirchnerismo, y de todo proyecto político, sea el intento de volver a juntar lo que 2001 separó para siempre: la política y la gente.
Las verdades eran estas:
1) Dentro de la democracia todo, fuera de la democracia nada. (Demasiado abstracta, pero es la primera).
2) "El ejército vencedor se juzga a sí mismo".
3) Cada nuevo gobierno gozará del derecho (a una retórica) para Refundar la República (cimentando sus logros, finalmente, en la continuidad).
4) No hay guerra popular, los pueblos aman la paz.
5) El peronismo es el progresismo posible.
6) La política de la democracia es el fin de la política como continuación de la guerra.
7) No hace falta decirse progresista para serlo.
8) Cada político se encuentra a la izquierda de sus bases (la democracia solidifica).
9) La sociedad tiene una sola clase: la clase política.
Las verdades eran estas:
1) Dentro de la democracia todo, fuera de la democracia nada. (Demasiado abstracta, pero es la primera).
2) "El ejército vencedor se juzga a sí mismo".
3) Cada nuevo gobierno gozará del derecho (a una retórica) para Refundar la República (cimentando sus logros, finalmente, en la continuidad).
4) No hay guerra popular, los pueblos aman la paz.
5) El peronismo es el progresismo posible.
6) La política de la democracia es el fin de la política como continuación de la guerra.
7) No hace falta decirse progresista para serlo.
8) Cada político se encuentra a la izquierda de sus bases (la democracia solidifica).
9) La sociedad tiene una sola clase: la clase política.
domingo, diciembre 20, 2009
(A Franco Vitali)
A vos que te dimos la remera,
sólo espero que vengas un día
a pedir lo que es tuyo.
A vos que te dimos la remera.
A vos que te dimos la remera, sí, a vos.
Roja y negra.
A vos que te dimos la remera.
Traela transpirada.
A vos que te dimos la remera.
Que tenés entre 18 y XX años.
A vos que te dimos la remera.
Traela chivada, papá.
Que la cosiste.
Que la descosiste.
A vos.
Que.
Te dimos.
¿Qué te dimos?
Te dimos la remera.
La roja y negra.
Para asustar.
Una remera lisa negra para asustar tu clase. Tu familia. Tu promoción.
Una remera lisa negra y el estampado en letras rojas.
A vos que te dimos la remera.
Venite con el hacha.
Estás en las filas del partido del Orden/desorden.
Mientras Chicos de Posgrado fundan su revista:
Montevideo. Mientras unos cuantos
ex hacen fila, hacen las paces, hacen bulla
y tejen. Vos, a vos,
que te dimos la remera, te pedimos
la última entrega.
Migran dirigentes al oriente por enero.
Pasa diciembre sin que nada pase.
Y ellos oyen su mp3 con música de Flacso mientras el río se mete en el cuerpo.
sábado, diciembre 19, 2009
19/20
Mientras aguardamos el cierre de comicios... (quedan pocos días si no votaste).
Mañana 19/20 en Ni a Palos.
"19 de diciembre de 2001. Cinco de la tarde. Calor. El aire está denso. Un militante del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA se acerca a la mesa de su agrupación en busca de alguna información, de alguna línea, de algo. Nada encontró. Silencio de hospital entre compañeros que no tenían nada en mente. Una compañera lo mira, y le dice una frase que lleva grabada: “dicen que empezaron a saquear Once”. ¿Quiénes? ¿Cuántos? ¿Bajaban del tren los saqueadores? La frase de la compañera ponía en palabras todo el silencio: la historia nunca ocurre con claridad. Y “esos” que estaban “saqueando” formaban parte de esa oscuridad que mueve hilos. Aquello que ocurría en el conurbano, prometía caer sobre la ciudad. La “compañera”, usaba el lenguaje ascético, policial, de nuestro inconciente: “dicen” (¿quiénes dicen?), “empezaron a saquear” (¿quiénes empezaron a saquear y qué?). Todos los mundos privados estaban rompiéndose. Y la “compañera” se sacaba de encima el virus de lenguaje sociológico con que hacía política para decir su verdad de gente, su miedo. El corralito había dado un zarpazo y había puesto en jaque el humor de la clase bancarizada que se asociaba al fastidio de los humildes. Piqueteros, ahorristas, punteros, intendentes, y pronto las cacerolas, con el fondo de negociaciones palaciegas de último minuto, formaban la combustión confusa que no le permitía a nadie saber qué iba a ocurrir, y, decididamente, hacia dónde iba a ocurrir lo que ocurriera. 19 y 20 de diciembre: una fecha, dos días en los que todo ocurrió. Hablamos con algunos protagonistas laicos de ese apocalipsis."
Mañana 19/20 en Ni a Palos.
"19 de diciembre de 2001. Cinco de la tarde. Calor. El aire está denso. Un militante del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA se acerca a la mesa de su agrupación en busca de alguna información, de alguna línea, de algo. Nada encontró. Silencio de hospital entre compañeros que no tenían nada en mente. Una compañera lo mira, y le dice una frase que lleva grabada: “dicen que empezaron a saquear Once”. ¿Quiénes? ¿Cuántos? ¿Bajaban del tren los saqueadores? La frase de la compañera ponía en palabras todo el silencio: la historia nunca ocurre con claridad. Y “esos” que estaban “saqueando” formaban parte de esa oscuridad que mueve hilos. Aquello que ocurría en el conurbano, prometía caer sobre la ciudad. La “compañera”, usaba el lenguaje ascético, policial, de nuestro inconciente: “dicen” (¿quiénes dicen?), “empezaron a saquear” (¿quiénes empezaron a saquear y qué?). Todos los mundos privados estaban rompiéndose. Y la “compañera” se sacaba de encima el virus de lenguaje sociológico con que hacía política para decir su verdad de gente, su miedo. El corralito había dado un zarpazo y había puesto en jaque el humor de la clase bancarizada que se asociaba al fastidio de los humildes. Piqueteros, ahorristas, punteros, intendentes, y pronto las cacerolas, con el fondo de negociaciones palaciegas de último minuto, formaban la combustión confusa que no le permitía a nadie saber qué iba a ocurrir, y, decididamente, hacia dónde iba a ocurrir lo que ocurriera. 19 y 20 de diciembre: una fecha, dos días en los que todo ocurrió. Hablamos con algunos protagonistas laicos de ese apocalipsis."
viernes, diciembre 18, 2009
miércoles, diciembre 16, 2009
Del yo en política
El debate sobre la futura vocación vetadora... me aburre. Me aburre cuando la política se estanca en alguna palabra: Kraft, subte, inseguridad, veto... Al veto no lo inventó Dios, ni los Kirchner. Por ejemplo, Macri vetó la prórroga de la ley de emergencia habitacional de la ciudad. ¿Para qué? Para poder desalojar ocupantes de inmuebles porteños. Dime qué vetas y te dire quién eres... Y ese veto ocurrió contra la propia voluntad de sus legisladores, quienes votaron a favor de la prórroga de la emergencia que suspendía desalojos. Y ese veto le permitió a Rodríguez Larreta ufanarse de uno de los mas estruendosos logros de su gestión: los desalojos silenciosos. Veto de esa ley + vaciamiento del IVC + reacomodamiento de las competencias de la Corporación del Sur + etc. suman una política articulada que camina en la dirección de una ciudad mas cara y menos poblada. Los poderes chocan, mas allá de las representaciones de las fuerzas, está en su naturaleza una cierta colisión, un cierto roce, ¿no? Toda tarea legislativa es una tarea de conversación, con tiempos mas dilatados muchas veces, y con tratos cotidianos tan intensos... que "forman parejas". O sea: el consenso es una palabra parlamentaria. Pero lo ejecutivo, siempre, desde el municipio Las Acequias de Córdoba hasta la ciudad mas importante del país, es una política mas a cara de perro. La pifiada de este tiempo es grosera, como trillado repetirla: juzgar en las formas todo lo democrático que se puede ser... encima si eso no deja bien parado a nadie. ¿A quién le gustaría un 2010 con cien proyectos vetados? Ni siquiera al corredor de cinta de Olivos y su sed de venganza. Pero el parlamento es un sitio de madurez, no es un juicio oral y público permanente. Hace rato que el kirchnerismo actúa muchas veces como si una vasta obra de gobierno precipitara una dialéctica de lealtad, como si toda la agenda kirchnerista tuviese adentro todo lo que la sociedad necesita para ser mas justa... El ingreso universal estaba ahí, afuera. El kirchnerismo mejor era siempre una idea de representar "algo otro", un otro, pero alcanzó con un par de cacerolazos para que vuelva a fijar domicilio en la realidad: peronismo. Dream is over porque hay peronismo. Como escribió Juan Domingo Alberdi: ¿dominar el desierto sin el hombre del desierto? Pero... la tele dice que todo lo sólido se desvanece en un minuto de aplausos, en un minuto de aplausos de intendentes, en un minuto de aplausos de intendentes que en junio hicieron campaña por el otro candidato "pero voté por usted". El Parlamento 2010, amenazado por el nubarrón del Veto, pone a prueba la conversación política y, sobre todo, la capacidad para seguir empujando una agenda que siempre estará mas allá. (Detrás del pueblo el pueblo.) Y al final, cuando el kirchnerismo termine, en una oscura conferencia de prensa, a alguien le tocará la amarga tarea de confesar que no, que finalmente las sospechas eran infundadas, que el kirchnerismo no tenía armas de destrucción masiva.
martes, diciembre 15, 2009
Lo que intenta, sin embargo, este texto, no es hacer un listado armamentístico de cada país, sino refutar una falsa paradoja: que los gobiernos progresistas no pueden, ni deben, tener una política de Defensa, una política respecto de sus Fuerzas Armadas.
lunes, diciembre 14, 2009
Señores, de pie...
Tengo insomnio. Y a las 12 de la noche me puse a ver "El Nüremberg argentino", de Miguel Rodríguez Arias, cuya tapa dice mucho: a la izquierda los 3 de la junta, con sus gorras, miran hacia la derecha donde Strassera mira de frente, o sea, lo mira a uno, y se lo ve canoso, avejentado, como los abogados a los que les pesa el lento devenir justiciero de sus vidas, y arriba de todos está el tribunal, en una foto de archivo, cuyo centro ocupa aquel Arslanián, con su bigote negro. Esa pirámide... me conmueve, lo confieso. En el final del filme, sobre un insistente piano que al final nos enteramos que toca Lito Vitale, se ve al ex fiscal mirar la sala vacía, la misma sala donde entre abril y diciembre de 1985, en 78 audiencias y con 833 testigos, se juzgó a la Junta Militar. Uno diría: nada mas elocuente que la oposición a ese desfile precámbrico (¡qué choque de eras parece cuando uno ve a un Moreno Ocampo o Arslanián al lado de un Viola o Massera de uniforme!) de una figura desgarbada, de traje gris, como la de un radical, cuya voluntad traía la palma de la justicia. El filme tiene, de por sí, un título fallido, polémico, y me sumo al coro: no, no es Nüremberg, es mas que Nüremberg, no hay ejército vencedor, y la "conciencia universal" dependía de la voluntad de los hombres civiles. El filme permite, a la vez, asomar a los restos de esa época compleja, donde nadie tampoco sabía qué hacer, y donde la inspiración universalista y la prosa jurídica parece por momentos un modo de entregarse a algún designio divino. ¡Que sea lo que Dios quiera con todos esos tipos de uniforme poniéndose de pie cuando lo ordena un secretario de audiencia! A aquella teoría de que la parafernalia del Juicio permitió encubrir la continuidad del proceso bajo otras formas... se desvance un poco cuando uno ve la violencia de la escena. La articulación entre violación Derechos Humanos y economía, que ocupa el centro de la carta de Walsh, aún no había cuajado en el sentido común, así que la modernidad deseada de los 80 podía venir con olor a tarjeta de crédito y derechos humanos. Lo concreto es que la promesa básica del filme no se cumple: hay poco juicio, los testimonios centrales son mas bien mas actuales, y de testigos y testimoniantes del juicio, de ex jueces, etc. Hay momentos especialmente sugestivos: uno es cuando se advierte que los abogados defensores actúan como la continuidad civil de un interrogatorio en un sótano... rematado con un comentario de Strassera increíble: "falta que les pidan que se saquen las capuchas". El tema es que a alguno de los abogados le interesaba saber si el señor tal había estado afiliado al PCR (?). Otro poco del archivo que tiene su jugo son las intervenciones finales de los defensores. De dos: el defensor de Agosti y el defensor de Viola. Anoté sus nombres mientras oí esos escasos segundos en donde pretenden relativizar un poco la "competencia" de sus defendidos sobre los excesos. Siendo sincero, el doctor Héctor Alvarado, defensor de Agosti, suena mas prudente, mas calmo, y mas predispuesto a reconocer "excesos", de los que excusa a su defendido, por supuesto. Pero el de Viola no, el doctor José María Orgeira lee un texto donde aceptaría-la-hipotética-existencia-no-probada-de-algún-exceso-frente-al-que... pero desde ya confirma la nula relación entre su defendido y lo que (según él) no existió pero podría haber existido. Y eso provoca un momento inolvidable de gestos entre Moreno Ocampo y Strassera. Insisto: la película sobre el juicio tiene poco del juicio. Y es muy radical. Ahora bien, tengo una reciente costumbre de ver las pelis en la computadora, y eso me permite alguna distracción necesaria. Y estaba tan a mano Google que... no pude evitar googlear los nombres de estos defensores. Curiosidades del marchoso Orgeira (& Asociados): jamás menciona la defensa de Viola en su historia profesional publicada. Tiene entre sus clientes a algunos famosos, y, sobre todo a una: Susana Giménez. Bueno, eso se sabe desde siempre. La lista de clientes y el silencio sobre Viola algo dice, quizás, sobre rupturas y continuidades.
Google es memoria.
Google es memoria.
domingo, diciembre 13, 2009
viernes, diciembre 11, 2009
Un tal Klipphan... (CORREGIDO)
Klipphan me da vueltas hace unos días, para mí él es la cara del caso Pomar. El pequeño drácula del periodismo argentino. Y hoy recordé a quién me suena: está hecho de la misma carne que un tal Mirol. Yo recuerdo el programa de Mirol en Radio 10, después de Chiche. Un programa adonde los jubilados llamaban y nadie percibía el desprecio que tenía Mirol sobre esas voces y sobre esas historias. Siempre les cortaba un poco de prepo ¡porque no hay tiempo!, pero el jubilado alcanzaba a gritar en los segundos que tarda una mano en cortar un teléfono: ¡gracias por escucharnos! Un periodista envenenado que tiene una virtud en la voz: tiene voz de bueno… y maneja el silencio. Es un silencio como el de los que callan el odio, como el de los que buscan dentro suyo el valor de la conmiseración y la piedad, es un silencio de curas. Un pensamiento con sotana: y ya sabemos qué tienen, a veces, las sotanas debajo. Ese es el "biotipo Klipphan": Mirol. Y es la voz de los que frente a los robos y a las torturas de los ladrones para que digan los viejitos dónde tienen guardadas las joyas, piden el uso del monopolio legítimo de la tortura policial… Y está bien, su negocio es el orden. El de otros será el progreso. Los blogs son vengadores anónimos y sirven para el pequeño escrache al que tiene derecho todo buen salvaje ciudadano: así que… ¿por dónde le entramos a Klipphan? ¡Ayúdenme! Tengo un recuerdo mas bien reciente: en su programa de informes, en C5N, hace uno alrededor del copamiento de Montoneros al Regimiento de Infantería de Monte 29 en Formosa, el 5 de octubre de 1975. Un hecho que arroja algunas claves, acaso, del consenso de 1976. La excursión de Klipphan al norte buscaba hablar con los que vivieron la agresión, la madre de alguno de los conscriptos muertos, algún oficial, etc., que sean capaces de contar ese hecho “brutal, ciego, irracional”. (Hay algo sobre lo que habrá que pensar: esa incursión tierra adentro, donde hay cosas que no fueron rozadas por el relato progresista, por las políticas de la memoria… Es posible pensar que hay ahí una memoria, una laguna que convive con el feriado del 24/03. No sé, alguien alguna vez tendría que hacer el Ushuaia a la Quiaca tras esos rastros. Pero no Kliphan, no nuestro pequeño Drácula oficial de la compañía mediática. A él le interesaban poco los hechos, los detalles o el dolor. ¿A quién le interesan esos hechos mas allá de la revista Cabildo, mas allá de Mariano Grondona, a quién le interesa pensar la experiencia formoseña, su pequeña historia, la batalla de la memoria que aún se libra allí? Yo creo que vale la pena recordar lo de Formosa, tener esa memoria, construir con ella, y no despreciar los signos de dolor que aún perduran de esos hechos. Sólo que no subordinar esos hechos a esa equivalencia de demonios que los Grondonas buscan. Porque incluso en términos bastante feos, la sangre de esos colimbas no fue negociada, y se vengó.) Sigamos: hay un momento muy especial en el programa donde un ex colimba explica dónde lo sorprende a él el ataque, los tiros… Y Klipphan lo interrumpe, Klipphan quiere mirar por sus ojos, o que el otro mire por los suyos, Klipphan no quiere sentir que viajó al pedo, que vuelve sin la presa entre los dientes. El colimba quería reconstruir los hechos, la imagen, y se notaba un esfuerzo, digamos, genuino en respetar cierta fidelidad a aquella historia. Kliphan le decía: ¿vos cuando viste a los combatientes montoneros qué sentías? El tipo no entendía bien qué pasaba, quiénes tiraban. Y Klipphan le dice: y los viste huir, ¿huían como ratas? Y ahí, en esa pregunta, en la literalidad de la pregunta… ¡saltó la térmica! ¿¿Cómo?? ¿Y cómo es que huyen las ratas? ¿Klipphan sabe cómo huyen exactamente las ratas y pretende que el viejo colimba le describa a ver si eran ratas o no eran ratas? ¿Es esa una pregunta? ¿Es necesario saber eso? Y, por ejemplo, en tren de especular, el arrastre de la señora de Pomar hasta el cuerpo de Pomar que… contra viento y marea mediática, es el hombre al que amó, digo: ese arrastre, ¿qué tipo de animal describe? ¿Qué animal representa cada desesperación? Kliphan lo sabe, conoce todos los biotipos de este gran zoológico argentino. Kliphan es un niño sabio, no duerme de noche.
jueves, diciembre 10, 2009
miércoles, diciembre 09, 2009
Última pregunta a la Virgen
Che, ¿los medios van a decir: encontraron el cuerpo del pedófilo, abusador, violento, golpeador, secuestrador, mentiroso, falso entrevistado, fugitivo... de Pomar? No creo.
martes, diciembre 08, 2009
Preguntas a la Virgen
¿A veces no te dan ganas de que gobiernen los otros? ¿Que te digan qué harán cuando les toquen sus Kraft, sus delegados del subte, a quién van a poner en Trabajo? ¿A Barrionuevo? ¿Cuál es su idea acerca del modo en que se desalambra la frontera capitalista de Botnia que abrió un abismo entre dos países hermanos? ¿Y quién será el ministro de Economía? ¿Cuál va a ser el punto, el número exacto de retenciones patrióticas que dejarán contento a todo el mundo: a los sojeros haciéndose mas anchos con un precio récord y a los pibitos con la panza llena? ¿Cuál será ese número inamovible, fijo, eterno, ese punto exacto de equilibrio al que el gobierno kirchnerista renunció? ¿Existe ese número? ¿Y el dólar? ¿Cómo será el dólar? ¿No te dan ganas de saber cómo un Cobos, o un De Narváez, van a convivir con las paritarias? ¿Van a convivir con paritarias? ¿Van a coparticipar más con los barones del conurbano? ¿Van a viajar en helicóptero a oír de primera mano las necesidades de Ishi? ¿Van a darle la personería a la CTA? ¿La va a sentar un Macri a la CTA en la mesa del Consejo del Salario? ¿Va a haber Consejo del Salario? ¿Qué les aconsejan sobre ese Consejo sus consejeros? ¿Va a ser el itinerario final de todas las organizaciones sociales que viven de la "generosidad estatal" y que mojan la pólvora, porque mientras traban el tránsito construyen invisiblemente el orden, otro orden que hace respirable también al país, porque traban una superficie y calman la fiera por lo bajo? ¿No es Castells un adelantado en la confesión de que si hay organización no hay guerra, un adelantado en tanto y en cuanto pide que la SRA agradezca con un par de choris la férrea barrera invisible por la que nadie grita "¡rompan todo!"? ¿Habrá intervención federal contra Milagros Sala? ¿Cuántos muertos tendrán sus futuros gobiernos? ¿Habrá balas de goma o balas de plomo? ¿Harán una YPF? ¿Romperán relaciones con Bolivia, Venezuela y Ecuador? ¿Le dirán en la cara a Lula (o al que Lula ponga, ¡porque Lula pone a dedo!), o al Pepe, que su cualidad es la de ser moderados? ¿Elogiarán las izquierdas ajenas? ¿Estarán a la derecha o a la izquierda de Obama? ¿Se puede estar a la derecha de Obama? ¿Habrá libertad sindical? ¿Compensarán la demagogia de los Derechos Humanos no hablando nunca más del tema, no moviendo un solo dedo, no llamando a ningún juez para que "apure el paso"? ¿Cuántas Constituyentes Sociales sufriría un gobierno de Cobos, un gobierno de Felipe Solá, un gobierno de Macri, un gobierno de la señora Lilita? ¿En qué provincias? ¿Cuántos filmes que indaguen los yacimientos públicos vaciados habrá en el KM 0? ¿Habrá un pequeño argentinazo de las urnas porteñas bajo una nueva estrella de izquierda? ¿No habrá decretos, ni necesidad, ni urgencia? ¿Cada tapa de Página o Perfil que investigue alguna posible cometa, o que siga los pasos de alguna licitación, será celebrada? ¿El ministerio de Planificación será clausurado, bajo la sospecha de que toda persona en ese cargo sufre de corrupción congénita o espontánea? ¿Habrá boleta única con el señor De Narváez? ¿Le darán un ministerio a la oposición? ¿Habrá blogs oficialistas? ¿Otros blogs que se hagan cargo de los restos de una nueva prosa oficial? ¿Si Kirchner patentó el orden y la marca de la gobernabilidad en la década 00 cómo será ese orden en la década que sigue? ¿Qué es exactamente lo que está mal? ¿Qué mas allá de todos esos intereses que pasaron del "mas acá" al "mas allá"? ¿Golpearán las puertas de Calafate PARA QUE REINSTALE EL ORDEN? ¿No dan ganas de que gobiernen esos otros por un rato? ¿Por un ratito, para saber?
lunes, diciembre 07, 2009
Que se doble y no se rompa jamás!
¿Oí mal o en unas declaraciones Ricardo Alfonsín dijo que es importante que Cobos esté en la presidencia del senado para muchos futuros desempates? Como viene la mano no hay decisión política mas difícil de cara al 2011 que la de elegir "compañero de fórmula". Lentamente se va legitimando la idea horrible de que ese vice representa un contrapeso necesario, sobre todo porque la "amenaza" a la democracia nace del poder ejecutivo. En Paraguay pasa eso, con un agregado: es el vice de un gobierno que tiene un solo partido, El Liberal, al que pertenece ese vice. Estos años dieron un resultado: el poder legislativo y el judicial son las garantías democráticas frente al poder ejecutivo. Pero Ricardo Alfonsín es uno de los dos radicales que me caen bien. Ricardo + Margarita. ¿Por qué? Porque Ricardo dice lo que piensa. Y porque está enamorado de lo que piensa. Cuando le preguntaron sobre las "recientes declaraciones de Susana" dijo algo que está bien: dijo que desconoce los méritos o la autoridad de Susana para opinar sobre la inseguridad. ¿Tenía todas las de ganar y eligió perder? No. Lo que pasa es que hay un aspecto que hace al pensamiento radical por excelencia: no suscriben en nada a la anti-política. Un radical puede ser golpista, neoliberal, coimero, coimeado, bandolero, zapatito blanco, progresista, procesista, revolucionario, pero no es un tipo que odie la política. Al revés, pecan a veces de esa prosa institucionalista, partidista, partidocrática, digamos, que excluye un poco la apertura hacia nuevos signos. No son coleccionistas de ONG's. Un radical ama su parroquia, como el curita del barrio sus ovejas, su padrón. Peina. Y es, de todo el arco político, el que mas les hubiera gritado a los de la inter-asamblea de Centenario: ¡vayan a la lavarse el ojete! Su partido es centenario. La política es milenaria. Y un radical de ley es uno que sabe quedar solo, con todo eso adentro.
Me fui al carajo. Pero en estos días de blanca noche, nada mejor que confiar en ese límite de los radicales.
Me fui al carajo. Pero en estos días de blanca noche, nada mejor que confiar en ese límite de los radicales.
domingo, diciembre 06, 2009
Fui con mi cuñado
que mas que cuñado es un hermano.
1
El chiste de dos delante nuestro era hablar con frases de Spinetta. El chiste era usar los nombres de sus canciones o versos memorables para armar las frases de la noche.
2
El chiste era malo. (También es pertinente preguntarse si es necesario que una canción se llame "La cereza del Zar" o "Jugo de Lúcuma".)
3
Yo no viví el abrazo Perón – Balbín, pero qué gusto tan argentino tiene que los viejos adversarios despidan amigos. El abrazo Spinetta – Charly o la inclusión del Indio Solari en la lista de los que le "hubiera gustado versionar", le puso a la noche ese sabor de armisticio, de antiguas camaraderías que persiste en la lógica y la estética militar. ¿Quién despedía a quién? O: ¿de quién era el cuerpo que se velaba?
4
Nada ocurrió cuando el arte atacó. Lo resistieron todos.
5
Mi banda: Invisible (pero se notó que la mística se la roba Pescado). (Y mi sensación fue que el momento de Invisible pasó un poco inadvertido por un solo error: fue un set demasiado eléctrico que borró los matices.)
Mi disco: el primero de Almendra. O: El jardín de los presentes, que podría ser una reescritura refinada de "el primero de Almendra".
Mi canción: 200 años.
6
Encuentro en la platea con amigo.
7
Dijo FV: primer recital del poskirchnerismo.
8
Quizás lo dijo por la referencia de Spinetta después de la versión genial cantada por Juanse de la mejor canción de Pappo que cierra Pappo's Blues 1. Los rockeros odian a los políticos. Los políticos aman a los rockeros. Los rockeros aman los recitales gratuitos. Listo el pollo.
9
Soy un gaucho de familia. (¿No es un poco mala onda escribir esto: "La entrevista se realiza durante casi una semana, por mail. Es una exigencia al parecer irrenunciable del artista que, convengamos, ofrece el beneficio de no escuchar las afectaciones desmesuradas de la música de su voz y, en parte, el divague diletante."?)
10
Ilusiones. iluminaciones o visiones durante el recital que no tuvieron nada que ver con él: 'Macri confirma la buena de que aún se pierde prestigio y capital por izquierda'.
11
Seguramente Alejandro Rozitchner estuvo ahí, en algún V.I.P., y razonando acerca del modo en que Spinetta fragua... etc., etc. Alejandro Rozitchner lleva años tratando de que a Macri le guste Spinetta. Y, llegado el caso, es mas fácil hacer que Spinetta vote a Macri que que Macri escuche Artaud entero. (Nota: me hartó Artó, no lo puedo escuchar mas...)
12
Había como una euforia radical en el ambiente. Había, también, muchos estudiantes de música con el aspecto de los que cometen el pecado rabioso: hacer el riff de Deep Purple (el de Smoke...) con guitarra criolla. Había gente con cara de escribir en su cuaderno Gloria: cadalso, cenit, magma, querube, aguas...
13
Hay algo absolutamente spinetteano que Capusotto puso en palabras: L.A. precipita las parodias mas fáciles del rock, a pesar de y gracia a, porque arriba del escenario es justo decir que Spinetta es... gracioso. Tiene menos solemnidad que el Indio, menos cinismo que García, responde a los energúmenos con una espontaneidad envidiable, etc., pero a él también se le hace difícil cagarse de risa con la gente para después recaer en "los cuerpos que caen como violines".
14
Spinetta hace bien.
viernes, diciembre 04, 2009
Hay un monstruo en la laguna
Si lo pensamos en la moral política o lo ideal, cabría preguntarse si la postura política más progresista es la de pedirle a los Estados Unidos….mayor intervención en un asunto interno de un país soberano. Si la forma de lucha revolucionaria pasa por reclamar al gobierno yanqui que recorte las remesas a regímenes autoritarios… sonamos.
miércoles, diciembre 02, 2009
Progres
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