Todo caballo lleva la sombra de un jinete desesperado

Quería volver con lo de las verdades de la democracia. Decir que tiene 20 es un homenaje a la Biblia argentina, y es que creo que no debe tener mas de 10. No obstante se trata de llegar a cumplir la meta de las 20 porque sí. El blog sirve para educar al soberano. El blog sirve para tomarse las cosas mas en serio, es al revés de lo que piensan algunos giles de por ahí. Ya no me dan vergüenza las cosas que años atrás hubiese ocultado. Si entrás a mi casa te topás con la tapa del disco de Julieta Venegas. No se va a parar esta máquina de emitir mensajes en años por su parca sobriedad, porque la sobriedad y la amargura se plantaron donde quedó el caballo empacado: bajo ninguna ilusión política mas que la que pone los pies en la situación de la derrota. Los mensajes serán siempre mensajes de conciliación. Es que son escritos después de la experiencia, que no viví. Queda pendiente, quedará, la larga marcha de una tarea reparadora. A mi me gusta cumplir el papel familiar de llamar a algunas cosas por su nombre. Pensar, escribir, es violar un pacto, buchonear... Estoy sentado sobre un montón de cables enrollados. Es una cima de mierda. Pero sobre la que tengo control. Va a salir a la luz, ahí va.

Otra verdad de la democracia: coloca inevitablemente a cada político a la izquierda de sus bases. La democracia solidifica, y emerge de esa piedra su clase mas viva: la clase política. Van a pasar 20 años hasta que ése cordobés entienda esto.

(mañana digo el número)