viernes, junio 12, 2009

Acá no había un blog (2)

Porque devolvió el conflicto a la sociedad. Porque sí. Por el orden, por el orden, por eso que no sabemos cómo decir. Porque hay paritarias. Porque hay empate. Porque clausuró el ciclo Derechos Humanos, el "trauma", inaugurando el fin del duelo y el comienzo de la gramática de la continuidad. Porque sí. Porque amplió la base de la gobernabilidad, ese estricto teorema... Porque mejora la mirada hacia atrás, hacia las "décadas de lo perdido". Y acentúa el corte ese que nos permite, quizás, no ceñirnos mas por el relato bíblico de todo lo que empezó "un 24 de marzo...". Es la condición del olvido. Kirchner levanta para una raza que puede decir: somos nosotros los que construimos el orden democrático. Kirchner no es Cobos. Kirchner no es Lilita. Kirchner no es Macri. No es Scioli, ni De Narváez. Pero Kirchner los salvó. Devolvió el conflicto no es: lucha de clases. Ni es Sumo. Democracia es conflicto. Democracia para el conflicto. Ley. ¿De dónde nace la ley, padre Alfonso? ¿La sangre prometida de las clases dominantes? Yo quiero ser llorando el ortiva que te dice: Kirchner es la ley del mas fuerte. Progresismo es la periferia en el centro. No es otra cosa. ¿Recordás lo que dijo Agustín P. Justo? "La sociedad se está transformando en su contextura, una noble aspiración de más igualdad, de mejor distribución de los bienes materiales, empuja y guía a las masas ansiosas de gozar bajo el sol..." Yo quiero ver llorar al ortiva, mamá. Lo mas revolucionario del pueblo es su deseo: ama el capitalismo, la flecha de fuego que apunta al corazón y enciende la llama eterna... ¡Un nuevo shopping! ¿No éramos menemistas y defendíamos la artesanía cultural del pequeño almacén al que venían a arrasar? ¿Lo recordás? K es menemismo real, menemismo de fronteras. Las familias que llegan por avenida Vergara al Jumbo Plaza Oeste. Kirchnerismo idealista, medido en splits, aires, celulares, ventiladores de techo... Tinelli con Derechos Humanos. Sí, porque lo que mas me copa, lo que mas me enferma, lo que me saca, lo que me pone loco de garantías, lo que me abre el corazón, mamá, es la forma en la que impuso su humanismo... ¡a lo bestia! La democracia no es una dictadura blanda, la dictadura está privatizada. Es el orden bárbaro ahora en que todo es barbarie. Barbarie o barbarie. Barbarie y barbarie. Y sin embargo, esta presidencia salida del fango, y que preserva uno de los pocos relatos (¡vamos por el nudo! ¡se viene el desenlace!) con su globo continental... oh globo: dicen que debemos entrar al mundo, pero yo voto a los que dicen que nosotros también ya somos mundo! Ya somos mundo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

genial tincho

Anónimo dijo...

¡Bien ahí, Martín!

Tomás dijo...

No tengo idea por qué, pero me hiciste acordar al Viñas de "Cuerpo a cuerpo".

Abrazo, gran post.

Luciano dijo...

Martín,
este texto le come el hígado a los bienpensantes (propios y ajenos);el kirchnerismo carneado y puesto al sol.
Ahora hay conflicto y orden, hay derrame real y el pueblo va por el consumo perdido.
Los inconformistas perennes recitarán el manifiesto que mejor saben.

Un Abrazo Grande, Martín.