martes, septiembre 15, 2009

¿Y si no descartamos lo obvio?

por Pablo E. Chacón

Por ejemplo: que el vicepresidente de la Nación, Julio César Cleto Cobos es radical y mendocino; que la señora Silvina Giúdici es radical de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, ahijada de Enrique Nosiglia; que el senador Enrique Thomas es mendocino, aliado de Felipe Solá y peronista-cobista. Este es el cobismo realmente existente, esa nebulosa ideológica que quiere tomar la posta en el 2011. ¿Alguien escuchó hablar alguna vez del señor Thomas? ¿Algún proyecto de ley del señor Thomas? Sabemos quién es Nosiglia y quién Cleto. Y justo cuando se discute en Mendoza el nuevo articulado de la ley de medios, el gran diario argentino, posando de víctima después de la imperdonable performance de los golden boy de Echegaray, le da a Quique Thomas la oportunidad de salir del anonimato. Mendoza, zona de gente glam: José Genoud, Pedro Pou, Eduardo Bauzá, Flamarique, el genial Baglini, Manzano, Daniel Vila, Nicolás Becerra, Raúl Pedro Juan Moneta, José Octavio Bordón. Y del fighter Pablo Chacón. Pero veamos la pieza del señor Thomas. “Descartemos lo obvio”, advierte de entrada. “Salvo minorías políticas o económicas decididamente reaccionarias, todos los sectores democráticos del país estamos de acuerdo en reformar la Ley de Radiodifusión vigente”. Faltaba más. Faltó que agregara culturales a las minorías políticas y económicas, como si hubiera alguna economía que no fuera política. Acaso hubiera sonado menos obvio. Extraño leer “Ley de Radiodifusión”. ¿O no se trata de la Ley de Medios K? Extraños silencio de algunos conocidos, los amigos a los que podría sospecharse, les abre el juego la ley, con las telefónicas adentro. El cuadro se compone como se compone un cuadro. ¿Alguien cree que el señor Thomas nació a la política por generación espontánea? Dicen que el senador nunca vio al Chueco Mazzón. Sin embargo, Cristina Fernández -en la versión de la corneta, apabullada por la presión popular, es decir, mediática- dijo basta, se terminó, nada de telefónicas, la oportunidad se la pierden. ¿No quieren telefónicas? No hay telefónicas. Pero tampoco más monopolios informáticos. Basta de vivir aprisionados por Telefónica o por Telecom, por Multicanal o por Cablevisión, y por el control policial de Telefónica, Telecom, Multicanal y Cablevisión, casualmente, empresas, en alguno de sus segmentos, vinculadas al clarinete. Que sigan existiendo. Pero que dejen existir a otras. ¿Qué tienen mejor tecnología? Con plata, cualquiera tiene tecnología. El talento se tiene, no se mendiga. ¿Los contenidos eran el problema? Bueno, ahora la competencia, después de una sobreoferta tecnológica inevitable que todos los oferentes a la larga conseguirán, será por los contenidos. Si gana Tinelli, gana Tinelli. Si gana el Pancho, gana el Pancho. El canal Encuentro no se armó sólo para ganar dinero, como la medida de la presidente no es sólo un cálculo para ganar la voluntad renuente de la centroizquierda que suele visitar a Duhalde más veces de lo que uno sabe o imagina. Porque convendría reconocer que no hay medida de este gobierno que los fiscales de la moral y las buenas costumbres republicanas, no pongan en la balanza del debe y el haber. A no asustarse que no están las cabezas de Igor y de Carlos Slim afilándose los colmillos para robar los bienes simbólicos de los patriotas de turno. Y paguen el papel como todos los diarios y revistas. De eso se olvidó el senador Thomas y Solá, otra vez debe haberse hecho el boludo. Y dejen elegir no soportarlos más, los que no quieren soportarlos más, que puedan no soportarlos más. Y si se prefiere alquilar un video o un dvd, escuchar música o leer y no verlos más porque los medios pequeños y las cooperativas no pueden competir en calidad y producción con las sesudas investigaciones sobre el paco o los enlatados en oferta que traen del país del norte, pues bien, que así sea. Si algo faltaba para probar que esta nueva ley no era o no es sólo un negocio, ahora mismo, como están las cosas ahora mismo, cualquiera puede evitarse TN, canal 13, Sietecase o lo que sea. Es más difícil con internet: cortan la señal, la manipulan, controlan los passwords, los hacen circular adrede, impiden la llegada o la salida de correos. Y publican artículos para resguardar la seguridad que esas mismas empresas violan. El senador Thomas, acaso ministro del interior de un hipotético gobierno de Cobos o de Solá (Macri se quedó esperando a Julio Argentino Roca), está preocupado por las maniobras del grupo Prisa. La nueva ley de medios impedirá esas maniobras y tendrán que deshacerse de algunos eslabones de producción y reproducción de sus productos. Yo ya no me pregunto más por qué esta ley no se mandó al Congreso antes. Sólo quiero que se apruebe de una vez, con telefónicas o sin telefónicas. Habrá que esperar que la derecha reconozca el gesto (aunque no sean señores cultivados en la lectura de Ernest Renan e Hyppolite Taine), y que la centroizquierda acompañe. Si así no fuere, la “autoafirmación nacional y los monopolios adictos”, como escribe con prosa soberbia el señor Thomas, seguirán por otro período y por muchos más, igual que los negociados de los amigos del poder, que va de suyo, del lado de los esclavos, tendrán otros nombres y apellidos.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Chacón cada vez mejor.

Clandestina dijo...

Una aplanadora q arrasa y como cada nueva nota q escribís, Pablo, supera con creces a la anterior.

Nunca escuché ni leí sobre el Sr. Thomas hasta ahora. Ni siquiera cuando se estudió y se aprobó el proyecto "Potasio Río Colorado", de la minera anglo-australiana Río Tinto, para extraer ese mineral en Malargüe, Mendoza, con la sospechada contaminación de las aguas del Río Colorado que abastece también a las provincias de Neuquén, La Pampa, Río Negro y Buenos Aires, desde donde se exportaría el cloruro de potasio, ahora, a Brasil. El proyecto fue comprado por la minera brasileña Vale (x unos 2.900 M de pesos) a Río Tinto, cuando desistió de continuar por el impacto que les causó la crisis (despidieron a 14 mil empleados en todo el mundo). El tema es extenso y complejo, sobre todo por el resultado de un estudio de Impacto Ambiental, los insumos energéticos q demandaría y la contaminación del Río. Para quien le interese más info: www.ecoportal.net/content/view/full/88072 (encontrarán más data si la googlean, claro).

Disculpas por la extensión pero recordé el proyecto y no al Sr. Senador y, como además es amigo, aliado o símil de Solá q fue quien autorizó el ingreso al país de la Soja Transgénica RR -la del glifosato, sí- (lo detallaré mejor en comment de otro post), tampoco pude dejar de asociarlo. En definitiva deberemos concluir q nuestro país es un pañuelo. Todos (ellos) tienen q ver con todo.

Ultimo detalle en referencia a la Ley de Medios: para TN es la Ley de Control de Medios K. ¿Hace falta más obviedad, más retorcimiento?

Anónimo dijo...

qué sorpresa, un ganso "bueno", ¿pero es que hay gansos "malos"?

Anónimo dijo...

Che, no era que el suicidio no se legisla?

Anónimo dijo...

Che, no era que el suicidio no se legisla?

Anónimo dijo...

eso sí que es gracioso

Anónimo dijo...

es muuuy gracioso, como el malevo de la pipa, el sable y el blasón

Pablo dijo...

un ganso verde!!

Alejandro dijo...

vamos chacal!