- Hay alguien mas solo que Lo Vuolo: alguien con buena fe, buena leche y tiempo que tiene ganas “de apoyar al gobierno”.
- No, no hay espacio, nadie te da una pala o un ladrillo para esta “jornada solidaria”. Ser kirchnerista, a secas, es ser un microemprendedor. La política a la altura de una economía social: club del trueque.
- El kirchnerismo y su núcleo duro que magnetiza el capital de una historia preexistente, y que cuadra en su dialéctica ineludible y, a la larga, excluyente.
- Los bloggers no son los emos de la política, ni tres tristes tigres, sino un caso testigo de una periferia inquieta que sobrevuela estas dos dimensiones: la historia que se construye a pesar de todo y de todos, y la dinámica cerrada de un proyecto de poder que se conecta con ella en una frecuencia llena de distorsiones.
- La política es para los que creen que ya no hay nada que preguntarse. O algo así. La tierra para quien la trabaja.
- ¿Todos los tipos menores de XX años tienen la obligación de pensarse mas allá de?
- Sí. Tres veces sí. El ortiva de la tierra que lloras.
- Lo que llamamos peronismo, lo que seguimos llamando peronismo, aún los muchachos kirchneristas, es algo que no se explica si no se entiende el partido de poder, que construye orden y representación, hijo de la derrota electoral de 1983. Hijo de esa sangre en el ojo, no hijo de la sangre derramada.
- Yo sólo le pido a San Jauretche que venga la nueva leche. (La buena leche es lengua muerta.)
- Kirchnerismo como esa lluvia frente a la que dice el paisano: es una bendición. No es acumulación. Esa debilidad hará difícil la defensa.
- El protagonismo vendrá después, cuando haya que defender lo que quede. Lo mucho o poco que quede. Toda esa justicia que quede. El pos-kirchnerismo dirá quién es kirchnerista.
5 comentarios:
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http://www.radiomundial.com.ve/yvke/noticia.php?t=31496
http://www.latindadd.org/index.php?option=com_content&view=article&id=403:fmi-entrega-150-millones-de-dolares-a-honduras-pese-al-golpe-de-estado-&catid=38:noticias&Itemid=114
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Me gustan varias.
Me quedo con la última.
Van a ser momentos raros, cuando bichos como DeGenaro vengan a ponerse de este lado del carro y pidan un lugarcito para apoyarse a empujar... con qué cara lo vamos a mirar nosotros? con qué ojos nos van a mirar ellos? "qué hacés vos acá?!"
A alguno se nos escapará una puteada por lo bajo, pero los vamos a recibir. Puteando y mordiéndonos los labios, los vamos a recibir. Seremos mejores.
El protagonismo vendrá después, cuando haya que defender lo que quede. Lo mucho o poco que quede. Toda esa justicia que quede. El pos-kirchnerismo dirá quién es kirchnerista.
Una bomba.
Felicitaciones
La última sentencia es fulminante.
Quisiera yo, más bien, que el pos-kichnerismo diga quien cree en un proyecto más allá de los nombres.
Si no es el alfonsinismo, se fue (del Gobierno, digo) Alfonso y se acabo el proyecto, cada uno por su lado y que se sálvese quien pueda
Galimatías, coincido y cómo! Descreo de todo "ismo", no soy de nadie. Elijo creer en una idea de pertenencia colectiva q me interprete y represente; abrazarla, trabajarla, cuestionarla, q sume, evolucione y crezca para q sea realidad, aunq no llegue a verla. Simple y claro como el agua: igual q miles y miles quiero un país para 40 millones, no para 8. Ese es mi faro.
Y, con o sin ayuda de San Jauretche, confío y deseo que venga la nueva leche con buena leche.
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