miércoles, abril 02, 2008

El fin de una era

1

No se puede ser hegemónico si eso supone que el 80% te quiere. Cosa que, en los votos, nunca ocurrió.

Dos subproductos valiosos de esto: la revalorización política de Cristina y de Martín Lousteau.


2

2 de abril en clave reconstrucción democrática: soldado, gracias por perder. Acá, desde acá, desde este torpedo, en el que creemos que recordar es un acción política del presente, aspiramos nacionalmente a que ningún patetismo continúe actuando y acentuando el déficit de historicidad que envuelve al problema Malvinas, que es una causa nacional. Su malditismo radica en el contexto social y político en el que su capítulo guerrero se desarrolló, atrapando la raíz en una operación política nacional y popularmente necesaria: tumbar al brazo militar, al partido militar, cosa que ocurrió (siendo capaz de borrar cualquier mínimo rastro en su honor, bajo el cual pueda ser recuperado). Pero si se hace la historia de Malvinas, se recorre su itinerario en la historia argentina, la guerra podrá estar envuelta en formas políticas horrorosas, pero incapaces de ocultar la justicia de su causa.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Con la guerra de Malvinas, toda la sociedad argentina tenemos un problema: es cierto que fue una decisión del gobierno militar que era una dictadura; pero toda la sociedad la apoyó. NO es cierto que era imposible manifestarse en contra. Pero todos optamos por adherir, sin condicionamientos. El "error" de la guerra de Malvinas no es atribuible excluisvamente a los militares, es de nuestra sociedad toda. Y no había ninguna "operacion politica nacional y popularmente necesaria" de tumbar al gobierno militar. Eso fue un "regalo" que nos vino casi por casualidad

Fede Vazquez dijo...

"todos"???

Cómo era eso que se podía manifestar el desacuerdo en plena dictadura?

En cuanto al "regalo" y la supuesta falta de políticas tendientes a tumbar al gobierno militar.... recordaría el paro de la CGT horas antes del anuncio de la guerra.

La guerra (su final) desmoronó un gobierno que ya estaba en crisis.

el tiempo va separando malvinas de los milicos, y eso es bueno

Martín dijo...

Lo que digo es que Malvinas trasciende el capítulo de la guerra. Punto. La verdad de por qué el supuesto "todos" estuvo ahí, y encima muchos de los que el 30 también estuvieron, es la que explica que en el corto plazo la operación era efectiva. El anónimo lo plantea desde el principio mal, y al revés. Lo que yo creo es que la causa es socialmente indiscutida. Pero atrapa al problema Malvinas en la niebla de un militar borracho, en la trasnoche militar, en la mala operación, etc. Entonces es una guerra cuya reivindicación, además, es una reivindicación mas que bélica, es una reivindicación de soberanía cuya popularidad antes del 82 ya existía. Pero que la guerra, la posguerra, empaña. Yo no acusaría a la sociedad argentina de vibrar por los tambores de una guerra. Incluso, ya en el plano directo de los hechos, hay evidencia de que lo que se intentó fue negociar desde la posición de la invasión. En fin. Da para mucho. Pero el anónimo creo que agarra el problema al revés. Incluso yo lo que digo es que desde el 55, nuestras FFAA, dominadas por la hipótesis de guerra interna que las habían desgastado y las enfrentaban a un tiempo nuevo, habían recobrado un prestigio u honor en Malvinas que la recuperación democrática, y miles de etcéteras desmontan; entonces lo que produce, mas allá de las contradictorias intenciones, es el fin del Partido Militar. No sé si los DDHH alcanzaban a tumbarlo. El fracaso de la guerra sí, porque era el fracaso de una guerra para la que oficialmente fueron creados los ejércitos. Guerra regular. Pero recordemos que los montos, desde las cárceles ofrecían donar sangre, recordemos la actitud de toda la plana de la Multipartidaria, la CGT, incluso los combativos (que los hubo, y muchos mas de los que se dice), las izquierdas, etc., todo eso que no hace mas que apuntalar la hipótesis de causa nacional y popular. Lo que pasa es que en Malvinas, esto dice por ejemplo Federico Lorenz, colapsa un modelo de nación. Por eso Malvinas escenifica algo tan potente. Políticamente hay que reivindicar la causa.

Anónimo dijo...

Malvinas es la única guerra perdida (si por guerra nos limitamos exclusivamente al enfrentamiento bélico con características regulares). Aunque estén detrás de una bruma, se ganó la independencia y se destrozó el Paraguay. Con Malvinas se cierran y se abren muchas cosas. Finalmente se viene a pique un ejército desde lejos ajeno a los intereses reales de la nación, se le viene la historia encima y lo sepulta. Tampoco para inglaterra fue un proceso menor, fue un cheque en blanco para que se definiera el cambio en la legislación laboral inglesa (incluso me contaron que guardan un pedestal en el parlamento para el busto de Thatcher) Bien dice Vázquez, el proceso que separa la reivindicación de derechos de la trasnochada milica está empezando a ser más claro y es en la comprensión del ex-combatiente donde está el hueco más hondo, en un discurso muy poco publicado se mezcla el odio y la denuncia al mando y la creencia en un acto de soberanía absolutamente genuino en su base. Finalmente, tenemos un territorio ocupado, no sólo importante desde lo simbólico, Malvinas también produce.

Diego F. dijo...

A mi me da mucha pena por los soldados que murieron durante y después del conflicto. Sin embargo la guerra no tuvo razón de ser y creo que el enfoque tiene que ser superador y ser orientado hacia las razones reales -legitimación de un regímen terrorista- en pos de poner las cosas en su lugar.

Saludos

Alea dijo...

coincido en general con lo que dice el post, ahora, el porqué costó-cuesta tanto separar la Guerra de Malvinas de la trasnochada milica? eso tiene que ver con la sangre. si Malvinas hubiera sido un episodio virtual de amagues diplomáticos hoy sería una bandera más, una de las tantas causas nacionales,pero los muertos y su simple, pero inevitable, relación con el whisky y el P.M. hacen lo difícil de la cosa. después si vale la pena como bandera, si son o no productivas las islas, si hay cosas más importantes, eso es otro tema,

saludos

Fede Vazquez dijo...

Si,entiendo, pero tengo un problema en cuanto a la "causa". En lo que significa. Me remite casi automaticamente a la campaña militar del 82, a los soldados en las trincheras, etc. Si causa es el reclamos de soberanía, no hay dudas, pero creo que el ruido del debate pasa porque no es sólo eso. O aún no.
Tengo también algunas dudas que lo del 82 pueda verse como un capitulo mas, horroroso como dice martin, pero concatenable a una causa nacional y popular hisdtórica. Digo, no me alcanza que los montos y la "gente" (je) hubieran apoyado tácita o explicitamente en aquel momento. El marco político era tan, pero tan desfavorable, que Malvinas jugaba como una encerrona política de la que nadie salia bien parado. Ahí radico la brillantez de apuesta de GAltieri, logró que la sociedad al menos por un mes se ubicara políticamente en torno a la invasión. Ahora, la liviandad con que prontamente la sociedad abandonó la causa, y hasta a los propios protagonistas me hace dudar mucho de su verdadero caracter popular.
Por otra parte, ningún gobierno popular previo al 82 pensó en un desenlace militar del asunto.
No sé si hay mucho mas que mimar todo lo que se pueda a los sobrevivientes y tirar las broncas una vez por año en la ONU.

Anónimo dijo...

La voz de Perlongher sigue siendo inaudible